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PROYECTORAYUELA

Madrigal

Madrigal

Ojos claros, serenos,
si de un dulce mirar sois alabados,
¿por qué, si me miráis, miráis airados?
Si cuanto más piadosos,
más bellos parecéis a aquel que os mira,
no me miréis con ira,
porque no parezcáis menos hermosos.
¡Ay tormentos rabiosos!
Ojos claros, serenos,
ya que así me miráis, miradme al menos.

Aitor: Gutierre de Cetina, escritor sevillano del Renacimiento (1520-1557) con apodo pastoril de Vandalio  quien dedicó este poema a una hermosa mujer llamada Laura Gonzaga.

(Imagen y texto tomados de Google.com)

2 comentarios

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*Cambiar el destino de los conocimientos, el aprendizaje será mayor cuanto más ... ...

Gris -

Hermosa tu elección, Augusto, tanto de imagen como de poema...bellisimo!!!